Tarde de huerto en familia
En este nuevo curso que iniciamos, damos continuidad a la labor en el huerto emprendida el año anterior. Las tardes de huerto en familia se convierten en un lugar de encuentro, cooperación y aprendizaje compartido. Trabajar juntos en la tierra nos ayuda a conectar con la naturaleza, seguir los ritmos del año, cultivar el asombro y la paciencia, y, por supuesto, disfrutar de la cosecha.
En lo que llevamos del curso se han celebrado dos encuentros. En la primera jornada participaron varias familias de la tercera clase, junto con Don Roberto y Doña Gema. Ese día nos dedicamos a limpiar y desbrozar los restos del verano. Fue una tarde de gran trabajo en equipo: niños, madres y padres colaboraron con entusiasmo, y el huerto quedó completamente limpio. La jornada finalizó con una merienda compartida, disfrutando del entorno y la compañía.
En el segundo encuentro acudieron varias familias de la tercera clase y alguna familia del grupo Horticultura Micael. En esta ocasión la tarea principal fue mover el compost, volteando la gran pila para separarla en dos montones. Fue un trabajo intenso de pala y carretilla, mientras uno de nuestros trabajadores araba la tierra para preparar la próxima siembra. Como siempre, cerramos la tarde con una merecida merienda.
Las tardes de huerto en familia suelen celebrarse los viernes por la tarde y las tareas varían en función del momento del año y las necesidades del huerto. Las fechas concretas se confirman según las condiciones meteorológicas y la convocatoria se realiza de dos formas:
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Por un lado, Don Roberto, maestro de la tercera clase, invita a las familias de su grupo, que serán quienes trabajen en el huerto a lo largo de todo el curso.
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Por otro lado, se publica también en el grupo de WhatsApp “Horticultura Micael” ( https://chat.whatsapp.com/Kt8usscMx21L9Wn0kWhXAI?mode=wwc)
Estos encuentros son una hermosa manera de compartir tiempo, crear vínculos entre familias y fortalecer nuestra comunidad, mientras aprendemos y disfrutamos juntos del trabajo en la tierra. Cada tarde en el huerto nos recuerda que, al cuidar la naturaleza, también cultivamos la cooperación y la alegría de crecer unidos. Si te animas, te esperamos para compartir trabajo, naturaleza y buena compañía.